Hay situaciones en la vida cotidiana que te superan, ves como una vez tras otra los poderosos, las grandes compañías que todo lo manejan, utilizan a su libre albedrío los conceptos que más les interesan, los retuercen del pescuezo y los devoran, regurgitándolos de nuevo como si fuera un parto, dando a luz un nuevo concepto acorde a sus intereses.
Ya hace un año que escribí un post similar al que voy a escribir, pero es que cada vez que me encuentro con una carta de este tipo me hierven los intestinos y me dan ganas de regurgitar también el desayuno para meterlo en el sobre y devolver la carta a su remitente. El post al que me refiero es este y si os apetece leerlo sabréis a qué me refiero. Es por ello que no me voy a centrar en las repercusiones que tiene para una gran compañía el hecho de hacernos a todos partícipes del buen rollito de ser ecológico, del reciclaje y todo ese gran engaño que mueve millones ... parafraseando a los Sex Pistols sería algo como " The Great Business Swindle" aplicado esta vez al mundo de la ecología.
Eso, ¡ayudemos a proteger la naturaleza! ¡dejemos de cortar árboles! ¡seamos solidarios con la naturaleza y con todo lo que contiene! Si, el principio por el que se rige esta frase es genial; eso no lo discute nadie ¿verdad? Reduciendo el consumo de papel evitaremos la tala descontrolada de bosques, los procesos de cloración del papel para su blanqueamiento, reduciremos el uso de agua ... ya sabemos de qué va. Nos lo han metido por los ojos y las orejas cientos de veces.
Pero, claro. Que una gran compañía, en este caso Orange, nos dicte la frasecita tiene guasa. Y más guasa tiene que nos aconseje pedir la factura electrónica por el bien de la humanidad, ... y nos dicte también las bondades de dicha factura electrónica frente a la de papel (que otros inconvenientes tendrá como el consumo de luz, consumo de tinta y papel en caso de querer imprimirla, etc).
O sea, al responsable de marketing de Orange y a su equipo creativo no se les ocurrió más frases que las que siguen para invitarnos a pedir la factura electrónica, ¿verdad? cerebros pensantes que deben cobrar una pasta por todo el proceso de comunicación de la marca en cuestión. Pues vaya tela.
Pero como en este caso la transparencia es lo que prima en los eslóganes de todas estas compañías y multinacionales yo les invito desde mi humilde blog a ser un poco más honestos con sus clientes y a cambiar dicho mensaje por el que transcribo a continuación:
Creo que este mensaje sería más acorde a la realidad. O sea, que en resumen sería algo como "pásate a la factura online que así nos ahorramos unos millones de euros que pasan de ser gasto a beneficio neto, porque cobrar te lo cobraremos igual en la factura, como hasta ahora".
¿Es o no es? pues eso, ¡y que se dejen de historias de ecologismo hombre!
