viernes, 30 de noviembre de 2012

Y tras las elecciones, ¿quién limpia toda esta m...?

Tras la tormenta electoral catalana parece que todo vuelve a su cauce, con ganadores (los más) y con claros perdedores (los menos), la independencia ha quedado aparcada, ya no es un tema recurrente en Cataluña ni en los telediarios del resto de España, ya no es noticia, ya no interesa a nadie. El órdago independentista que lanzó Artur Mas ha sido como pegarse un tiro en un pie y parece que ha salido escaldado de la experiencia. Y es que para ir de farol primero hay que saber barajar las cartas....

Decía que la tormenta ha arreciado y todo vuelve a la normalidad, ya sabéis, recortes, crisis, prima de riesgo, privatizaciones, etc. La vida vuelve a girar entorno a la maldita crisis y a los deleznables e incapacitados gestores de la misma. Misma película, mismos actores y mismos sufridores del 1, 2, 3 ... los ciudadanos. Y tras la vorágine electoral que todo lo engulle, el panorama en mi barrio (y supongo que en todos los barrios de todas las poblaciones catalanas) es desolador. Y no lo digo por la falta de limpieza, la delincuencia o los recortes sanitarios, no, lo digo por la cantidad de mierda que ha dejado tras de sí dicha campaña electoral.

A lo mejor no os habéis dado cuenta (que lo dudo), pero dando una vuelta por mi barrio de Zona Comanche de Barcelona he sido capaz (yo solito) de recitar en voz alta aquello de "la justicia NO es igual para todos" (parafraseando irónicamente a cierto individuo con corona de hojalata), o como minimo las leyes, y que mientras unos pasamos por el aro el resto de casta (la política) hace lo que les sale del nabo. Y en cosas tan absurdas como la que vengo a relataros se nota, que sí, que a lo mejor os parece una gilipollez, pero a mí como ciudadano de a pie me indigna: la publicidad electoral. (Nota mental: Imaginaos que se os ocurre pegar un cartel de vuestro negocio en alguna pared, ¿qué pasaría?)

Os comentaba que mi barrio, como todos cuando hay elecciones, se convierte en escaparate electoral. ¿Escaparate electoral? sí, hombre, me refiero a los muros del barrio, sean vallas de obra, postes de la luz, paredes de edificios ... todo aquello que pueda sujetar un cartel con la fotografía de un político se utiliza como base para meternos publicidad de un partido. ZAS! estamos acostumbrados a ver caras de neandertales intentando sonreir para conseguir un voto (¿os acordáis del capítulo de los Simpson en que el sr. Burns quiere hacer carrera política?). 

Bueno, tras las elecciones el panorama de las paredes del barrio es desolador:

elecciones catalanas 2012

elecciones catalunya 2012

elecciones catalunya 2012

Aquí he puesto cuatro fotos porque tampoco es plan de recorrerme todo el barrio y la periferia haciendo fotos con el móvil mientras arrastro al perro por mi particular vía crucis; pero estoy seguro que os podéis hacer una idea de lo que hablo. Cientos, si no miles, de carteles pegados en cualquier parte, de cualquier manera quedarán hasta que se pudran en todo tipo de soportes. Aquellos que los servicios municipales (pagados por nosotros) puedan quitar pues eso que perdemos en esfuerzo y dinero que podría dedicarse a otros menesters. Y aquellos que han sido pegados sobre paredes de propiedades privadas pues nada, la comunidad de vecinos estará muy agradecida de invertir unos pocos euros en su retirada, sobretodo de aquellos que han sido pegados con cola para papel (como vemos en la foto de aquí abajo):

cartel elecciones 2012

Si esto de las elecciones anticipadas por capricho de Artur Mas ya fue un engaño soberanista que sólo buscaba una mayoría absoluta para efectuar más recortes sin pedir explicaciones a nadie y en el que cayeron de cuatro patas la mayoría de individuos ... hay que sumarle el coste. Claro, ¿qué os pensáis que las elecciones son gratis? ¿que se las sacan de la manga y voilá? No, tiene un coste en millones de euros (desconozco el dato y paso de buscarlo para no ponerme más de mala leche). Y ya no sólo en cuestión de organización, si no en cuanto a coste en propaganda. 

Pero una vez han pasado las elecciones, unos se felicitan a otros, la prensa le lame el culo al ganador y los perdedores se felicitan porque podía haber sido peor, ... pero ¿quien se acuerda de toda la mierda que han pegado en las paredes? ¿quién coño limpia toda esta mierda que adornará nuestras vidas durante varios meses? A quien le importa ¿verdad? 4 meses después veremos en esos carteles la cara de algún político hipócrita con una sonrisa de oreja a oreja mientras se aprueba una nueva subida del IVA o un recorte más en Sanidad. Pues "oygan" yo creo que deberían responsabilizarse por llenar de mierda mi barrio, porque ahora tendré que oir cada mes cosas como que hay que reciclar, que las basuras hay que separarlas, que somos unos guarros o como ya expliqué en este artículo sobre las basuras en Barcelona nos dicen que "cada barcelonés/a genera 1,4 kgs de residuos al día. Reducirlos está en tus manos", amos no me jodas.

Lo dicho, que esto no es democracia, ni dictadura ni nada, es simplemente una tomadura de pelo monumental donde unos hacen lo que les sale del nabo mientras los otros bajamos la cabeza y arreamos pa'lante por miedo a la colleja. Que no señores, que esto no es normal. Si nuestros abuelos se levantaran de la tumba cogían los fusiles y se pasaban a toda esta casta de buitres por la piedra, ¿o no?.

lunes, 26 de noviembre de 2012

El cumpleaños del Señor Jesucristo

Haciendo honor al título de mi blog, por lo de cabrón digo, no he podido reprimir hacerle una foto a este cartel que apareció ayer por la noche pegado en una farola junto a la parada del autobús número 9. Fue salir de casa por la noche para pasear al perro como hago siempre y no poder evitar una carcajada al verlo. Así que pensé, si por la mañana todavía está pegado le echo una foto para que la pedazo de audiencia de este blog flipe lo mismo que he flipado yo.

Todos sabéis que mi barrio, Zona Comanche, es como Sevilla, tiene un color especial; bueno, un color y mucho más, yo creo que a los tontos nos echaron de todos lados y nos juntamos todos aquí. Si no no lo entiendo, vamos. Bueno el caso es que me hizo gracia el tema y dije: toma, para mi sección de fotos cotidianas ... y ZASCA! aquí ha quedado ya inmortalizada para la posteridad (o hasta que Google y Blogspot quieran, claro).

La verdad es que aunque estudié en un colegio de curas (de los famosos hermanos de La Salle, cole privado, si...) siempre he sentido bastante askiki por estos temas; ya sabes, de un cole de curas sales creyente o punk. Como podéis ver yo he salido punk, si, aunque muchos otros salieron más degenerados todavía y se acercaron al averno del heavy metal, jajaja ... En este caso, como os decía, la animadversión que siento hacia los autoritarios señores vestidos de negro creo que es enfermiza, no porque me hicieran soplar ninguna flauta (como la de Bartolo) sino porque al evolucionar como persona me dí cuenta de la sarta de tonterías y mentiras que nos contaban cuando éramos pequeños, los capones y la férrea dictadura argumental sobre temas en los cuales su autoridad era discutida. Así que cuando veo gente que basa sus argumentos en La Biblia siempre reprimo mis instintos  de réplica basándome en las sagradas escrituras del Libro Gordo de Petete ... amén.

Bueno, nada, que la imagen no tiene más gracia que la que es, que sí, que el 25 de Diciembre (fum fum fum) es el cumpleaños del Señor Jesucristo y que bueno, que lo celebraremos por todo lo alto, inmersos en un frenesí consumista que agotará nuestro intelecto atiborrándolo de pavo, canelones y cocido. Que amén, feliz Navidad y Feliz Año Nuevo. Ah! y eso, Feliz Cumpleaños Señor Jesucristo!!! y que cumpla usted muchos más.

PD: Y para que sirva a modo de homenaje al gran Miliki que recientemente nos ha dejado (DEP amigo mío, tú que formaste parte de mi tierna infancia) al señor Jesucristo le dedicamos hoy esta canción:

sábado, 24 de noviembre de 2012

Tomando conciencia del barrio: Zona Comanche

Creo que son muchas las entradas de este blog que se refieren al barrio de Zona Franca de Barcelona (al que yo llamo "cariñosamente" Zona Comanche); en ellas os he relatado de todo: robo de vehículos y posterior quema, accidentes de coche, cuchilladas, detenciones, rotura de cristales de vehículos y hasta tiroteos entre traficantes de droga. Evidentemente no váis a leer nada de esto en ningún periódico ni en ningún medio oficial. De cara a la galería Barcelona es una ciudad ejemplar donde, como en todas las ciudades, habrá algún carterista y tal y tal, pequeños hurtos y bla bla, mucho bla bla bla. Pero la verdad es que todos los que vivimos en esta alcantarilla de ciudad sabemos que no es así.

Mi barrio es uno de esos barrios donde los currantes de toda la vida, aquellos que antaño trabajaban en las antiguas factorías de la Seat de Zona Franca se fueron jubilando y creando familias cerca de su viejo puesto de trabajo. Un barrio formado actualmente por gente mayor y de origen humilde que han dado paso a oleadas de inmigración; ya sea gracias al abaratamiento de los pisos (la gente está mayor, la vida en Barcelona es muy cara y se van al pueblo como consecuencia de la crisis) como por la proliferación de viviendas de protección oficial destinada a la integración de minorías. 

Si hace diez años los yonkis que venían directamente de Can Tunis eran el principal azote del barrio junto con los clanes que les suministraban las drogas, hoy en día todo esto ha sufrido un cambio, se ha modernizado. La inmigración ha hecho mella en la actitud del barrio y lo ha vuelto incontrolable. Si a todo esto le sumamos la desesperada situación por la que están pasando muchos actualmente y le multiplicamos las oportunidades de delinquir elevadas al cuadrado de una In-Justicia totalmente inoperante podemos hacernos una ligera idea de lo que se cuece en Zona Comanche, el barrio sin Ley.

Los delincuentes campan a sus anchas conocedores de que no sólo la Ley no les persigue, sino que les ampara; personas con antecedentes, con más de 80 delitos a sus espaldas se ríen ya no sólo de los ciudadanos honrados sino también de la policía que atónita asiste a un festival de la delincuencia donde los imputados entran y salen de los Juzgados entre pitillo y pitillo.

Y puede que muchos de vosotros estéis pensando: - exagerao el menda este... hombre, pues sí, mi madre dice lo mismo, que no es para tanto (claro, ella vive en otro barrio mejor, donde casualmente ya la han atracado varias veces...). Pero bueno, creo que el cartel que la noche pasada fotografié mientras paseaba al perro habla por sí solo:


Lo dicho, que no son imaginaciones mías, que el barrio es todo un referente en cuanto a delincuencia, y por lo visto el dueño de la furgoneta lo sabe bien. - Oiga que no es por que no me roben, que vale, que lo entiendo, pero es que luego me da mucho palo ir al taller, compréndalo, hombre...

Siempre me he preguntado si este tipo de carteles son eficaces frente al robo, en mi barrio hay varios, desde el que hay en la puerta de la churrería que dice "No hay nada de valor dentro" hasta el arquetípico "Soy del barrio". ¿Serán este tipo de avisos más funcionales y eficientes que una alarma? Hombre, estos mensajes no lo se, pero hay uno en mi barrio, en pleno corazón de Zona Comanche, en territorio Apache que sí intimida a cualquier caco de medio pelo: "Propiedad de un Gitano". Este os digo yo que sí que funciona. XD